En este libro se aborda de forma magistral la problemática en la que se ve sumida una niña afroamericana víctima de violencia familiar y social, quien en su deseo de rehuir a su devastadora realidad, añora poseer los ojos azules y convertirse en un ser hermoso.
Pecola, la protagonista de esta historia, nos obliga a hacer frente a una problemática de la que son víctimas miles de niñas en todo el mundo. Niñas quienes han admirado los patrones de belleza occidentales, mientras desdeñan su propia piel, rostro, ojos y cuerpo, mientras niegan sus orígenes.
Adicionalmente, este es un descorazonador relato sobre el incesto, la pedofilia, la violencia intrafamiliar, la discriminación racial, social y económica. Un relato tan intenso como bien escrito, que cuenta con unas introducciones en cada capítulo que te mantienen en vilo desde la primera hoja del libro.
Ojos azules (1970) es un libro durísimo, necesario y vigente, pese a los más de cincuenta años que han transcurrido a partir de su publicación. Tengo la dicha de haberme encontrado con esta lectura, mil gracias a quienes la recomendaron.
Lean a Toni Morrison, era una genia a todas luces.
«…para descubrir la verdad sobre cómo mueren los sueños una no debería fiarse de las palabras del soñador».
«Juntamente con la idea del amor romántico, otro concepto se le reveló: el de la belleza física. Ambas ideas eran probablemente las más destructivas de la historia del pensamiento humano. Ambas nacían de la envidia, medraban en la inseguridad y terminaban en la desilusión».
«-¿Qué pasa con tus ojos? -Los quiero azules. […] Allí tenía a una niña fea pidiendo belleza».